El 4 de septiembre de 1949 se celebró por primera vez el Día del Inmigrante en la Argentina en conmemoración a la disposición dictada por el Primer Triunvirato de 1812, que tenía la intención de fomentar la inmigración y ofrecer protección a las personas de todas las naciones y a sus familias que quisieran vivir en nuestro país.
A lo largo de los años llegaron a estas tierras muchas familias de inmigrantes desde distintas partes del mundo. Trajeron consigo sus pertenencias, costumbres y conocimientos, y todos aportaron para el crecimiento de nuestro país. Estas migraciones se mantienen en la actualidad.
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